27 de febrero de 2011

Directo a su conciencia

CONFIANZA Y PERSEVERANCIA

Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. Isaías 26:3

Los dos últimos años fueron muy difíciles para Jaime. Desempleado, con la autoestima por el suelo y el hogar al borde del colapso, no resistió a la tentación de encaminarse por las tenebrosas avenidas de la deshonestidad. Al principio, todo iba bien. En pocos meses, había logrado ganar lo que no pudo percibir honestamente en varios años. Con dinero en el bolsillo, aparentemente su vida volvió a la normalidad. Tuvo paz exterior. Pero, pasaba noches enteras sin dormir, castigado por el peso de la culpa. A pesar de ello, creyó que valía la pena seguir ganándose el dinero de esa manera, después de todo, se ´podía dar muchos gustos que en su vida pasada no se podía dar, pero…..Repentinamente, cuando pensaba que nadie lo descubriría, su paz exterior se desvaneció, su delito se hizo de conocimiento público, y además de la vergüenza y el escándalo, acabó en prisión.
Es lamentable y triste que el ser humano crea que obteniendo cosas y comodidades materiales, obtendrá la realización de su vida y la de su familia, aunque  para eso tenga que ir en contra de la moral y la conciencia.
Jamás se obtendrá  la paz y la felicidad verdadera yendo en contra de los principios morales de la ley de Dios, solo Dios nos puede dar la paz, que en el fondo de nuestro ser anhelamos.
La paz que el profeta menciona, en el texto bíblico de  Isaías  26:3,  no es la paz del cuerpo sino del alma. La paz que realmente vale. Aquella que organiza nuestro  mundo interior y nos  prepara para los embates de la vida.
El profeta Isaías nos  habla en este texto a cerca de la paz que nace de la confianza en alguien que nunca falla. Nos habla de una paz completa y no a medias.  El profeta menciona la perseverancia como condición para recibir esa paz.
Dice: “Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera” por que en ti a confiado.
Perseverar, en el original hebreo, es la palabra camak, que literalmente significa “descansar la mente en algo”. Yo sé que es difícil descansar cuando el mar alrededor está agitado. Cuando no hay dinero para atender las necesidades de la familia; cuando la enfermedad toca a la puerta o la muerte  merodea.
Sin embargo, el consejo del profeta no falla: en los momentos más difíciles, coloca la mente y todas tus necesidades en Dios y descansa en él, aunque aparentemente nada ocurra, aunque te parezca absurdo. No desistas, persevera, porque Dios no miente, lo primero que Dios hará en tu vida es colocar paz en tu corazón, curando las ansiedades, Por eso hoy, aunque solo veas sombras en tu entorno, y no veas la salida, pon tus pensamientos en las palabras de Dios, plenamente convencido que Dios “guardará en completa paz a aquel cuyo pensamiento en Él persevera. Por que en él ha confiado. Amen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Canal de Tv

Watch live streaming video from ibsj at livestream.com

Vistas de página la semana pasada