No te metas en deudas
El rico se enseñorea de los pobres,y el que toma prestado es siervo del que presta. Pr 22:7
Uno de los enemigos más peligrosos que se introduce sutilmente en los matrimonios, familias y hogares son las deudas. Deudas que traen muchos problemas a la relación familiar, conyugal y laboral. Por supuesto, quien no va a dejarse envolver y seducir por los atractivos ofrecimientos de pago a largo plazo con un mínimo interés, para querer tener cosas que según nos parece de otra forma nunca se podrían obtener, cosas tales como carros, viajes muebles, celulares, computadores, electrodomésticos,. Etc
Endeudarse es tan fácil, sobretodo cuando se manejan tarjetas de crédito o cuando la entidad financiera le ofrece avances en efectivo, esta posibilidad de obtener cosas de manera inmediata por este medio, hace que nuestro codicioso corazón sea seducido y caigamos en la esclavitud del endeudamiento. No es la perfecta Voluntad de Dios que nos metamos en deudas.
La palabra de Dios nos dice claramente que: El rico se enseñorea de los pobres, Y el que toma prestado es siervo del que presta. Pro 22:7 Vemos claramente en este texto bíblico, que cuando nos metemos en deudas caemos en esclavitud, y por supuesto esto no es de Dios, porque la voluntad de Dios para sus hijos desde el principio de la creación, siempre ha sido que seamos libres de la esclavitud del pecado y de Satanás; por tanto un principio bíblico es que los hijos de Dios no seamos esclavos de nada, ni de nadie, excepto de Dios. Por eso Cristo dijo que cuando conocemos la verdad, la verdad nos hace libres Juan 8:32. Cuando Dios saco a su pueblo de la esclavitud de Egipto, le dio leyes y promesas para que rigieran su vida , y les fuera bien en la tierra que Dios les daría . Una de esas promesas fue: Te abrirá Jehová su buen tesoro, el Cielo para enviar lluvia en su tiempo, para bendecir toda obra de sus manos, y prestaras a muchas naciones y tu no pedirás prestado. Te pondrá Jehová por cabeza y no por cola , estarás encima solamente y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas Deut. 28:12
Como vemos, la voluntad de Dios para sus hijos es bendecirnos para no pedir prestado sino por el contrario prestar; ser cabeza y no cola, estar encima y no debajo; porque Dios sabe que las deudas, esclavizan roban la paz y enferman físicamente; además hacen que la gente se vuelva malhumorada, agresiva y hasta grosera.
Muchas personas viven en una angustia inacabable, bajan de peso, permanecen con un semblante de preocupación todo el tiempo, no pueden ni dormir ni disfrutar de su familia, por el simple hecho de que no saben cómo pagar sus deudas. Aquello que al comprarlo pensaron que les traia felicidad se volvió en desdicha porque las deudas son sinónimo de esclavitud.
Si tan solo desarrolláramos una disciplina de ahorro podríamos comprar al contado, en lugar de generar deudas que lo único que traen son dolores de cabeza, cambios de actitud y posiblemente golpes mas traumáticos para su economía y el bienestar de su familia. Es tiempo de empezar de nuevo.
No codicies lo de los demás, o lo que la moda le ofrece, aprenda a estar contento con lo que tiene. no se meta en deudas innecesarias, movido solo por el deseo de tener lo que los demás tiene que usted no tiene, porque le aseguro que será esclavo de las mismas., porque esto no es la voluntad de Dios.
Si alguien no tiene vivienda propia y paga arriendo y tiene la oportunidad de un crédito para adquirir su casa, pagando con lo del arriendo las cuotas de su casa , esa es una deuda justificada, porque es para librarnos de la esclavitud del pago del arriendo y Dios proveerá para pagar esa deuda por que el quiere que seamos libres en El.
Recordemos que Cristo nos hizo libres, y esta libertad es para todas las aéreas de nuestra vida, incluyendo las deudas. Así que si el hijo os libertare seréis verdaderamente libres. Juan 8.36
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